Aquí esta el siguiente capitulo. Espero que os guste.
-Tal vez
podríamos ir al parque que esta aquí al lado ¿No? –Me dice Emily intentando
distraerme un poco-.
Hace días que
estoy un poco mal porque aún no me creo que el tonto de Jack hiciera eso solo
para que Ian le pegara. Es más, Ian no tiene valor para hacerlo, así que lo que
ha hecho solo me ha importunado.
-Lo siento Emily,
pero tengo cosas que hacer y no puedo ir- le digo fríamente-.
En realidad no
tengo nada que ocupe mí tiempo pero no me apetece en absoluto. Ángela me mira
con su expresión asesina de siempre porque no le parece bien que me moleste
tanto por nada.
-Claro Alex,
ahora tienes que ir a casa a llorar y a pensar en lo mal que te va la vida
últimamente, pues no, te vienes con nosotras -dice Ángela con su humor habitual-.
Tiene razón, un
poco de aire no me sentara mal, porque al fin y al cabo él no me interesa
¿Verdad? Además algún día les tendré que contar la verdad porque ellas no saben
de mi pesadilla y tampoco saben sobre él. Al final se lo tendré que confesar, a
las dos, también les tendré que contar que no soy la misma desde lo que paso y
que a veces cuando pienso mucho en él me pongo a fumar o beber para olvidarlo.
Solo hace falta que esté entretenida para no acordarme, pero a veces me pongo a
pensar en que hubiera pasado si él siguiera aquí, conmigo. Si no me hubiera
dejado sola o si yo me hubiera ido con él.
-Alex ¿Te vienes?
Por favor – dice Emily intentando suavizar la respuesta de Ángela-.
-Sí, voy,
necesito despejarme un poco.
-Ya era hora de
que te vinieras con nosotras algún lado-dice Ángela sonriendo-.
-Lo sé.
Y nos vamos
hacia el parque. El parque tiene una especie de montículo en el centro, bastantes
árboles de todas las tipologías que puedas imaginar, y bancos de madera donde
puedes sentarte. Hay una fuente un poco oxidada, hierba que siempre esta recién
cortada, y niños que corretean jugando al escondite, o haciendo cualquier travesura
que se les venga en mente. Lo más hermoso de este parque es la hierba, porque
siempre que llego me estiro sobre ella.
Cuando llegamos
al parque no hay nadie, ni niños jugando, ni jóvenes tomando el sol, nadie. A
mi no me parece extraño ya que ahora tendríamos que estar haciendo clase y es normal
que no haya nadie. Corro hacia la hierba y me estiro. Me manchara la ropa, ya
que cuando me he estirado estaba húmeda, pero en vez de levantarme me quedo aquí
tumbada, hablando con las demás, hasta las ocho de la tarde. Cuando decidimos
irnos ya esta oscuro. Seguramente, mi madre ha llamado muchas veces al móvil,
pero como me lo he dejado en casa, no he podido contestar. La verdad es que me
lo he pasado en grande y no he pensado en él ni un segundo.
En aquel momento
llegamos al cruce donde cada una seguirá su camino y tenemos que separarnos. Yo
sigo tan tranquila pensando en las cosas que hemos hablado cuando de repente
aparecen dos individuos de unos cuarenta años que me miran fijamente y entonces
me entra el miedo. Cada vez se me acercan más y más y yo sigo sin saber que
hacer. ‘’Me van a matar’’ pienso ‘’Una bonita forma de morir’’.
-Que miráis
vosotros dos -les digo, y entonces se giran pensando que se lo he dicho a otra
persona, este es el momento-.
Salgo corriendo,
corro como si la vida me fuera en ello y me acuerdo de la maldita pesadilla que
por más que corro al final siempre acabo muerta. Y así es en la vida real
también porque, aunque yo soy más joven, el tabaco me pasa factura y me
alcanzan. En aquel momento me pongo a gritar. Veo una sombra ''se acerca
alguien, estoy salvada'' pienso mientras los dos tíos se acercan y están a un
paso de mi. Resulta que esa sombra es Jack y pienso ''él me salvara por mucho
que le caiga mal me tiene que salvar''. Pero en vez de decir ''dejarla en paz'' o ''no la toquéis'' dice:
-¿Puedo unirme a
vosotros?
uoooooooooooooooohhhhh!!
ResponderEliminarJack eres un frgopsnmvqpefn vbferpqj
ya te vale capullo ¬¬
me encanta enserio
o lo cuelgas ya o:
-te rapo
-te mando a la arena
-moriras entre terrible sufrimiento ¬¬
alla tú...